Pueblo Liebig, 20 de noviembre de 2008. Cuando, en los primeros días de septiembre, vimos el camión cargado con las "retorchas" fue un golpe, saber que se llevaban el hierro y ver el desguace es doloroso. Pensar en la posible demolición de la fábrica es impotencia y fracaso. “¡ Nunca entré en La Fábrica ! ¿no voy a poder conocerla más?”, preguntó mi sobrino de 10 años y me sentí responsable. Decidí difundir “el laborioso trabajo de extracción” del patrimonio en Pueblo Liebig, porque todos estamos perdiendo un pedazo de la historia social y económica de la producción alimentaria, del trabajo de la carne de Argentina y de la región binacional del Río Uruguay. La gacetilla circuló desde el 4 de noviembre de 2008 entre arquitectos, organizaciones civiles, defensores del patrimonio y de la historia, amigos; y el hecho corrió como pólvora. La ayuda de René Boretto, director del Museo de la Revolución Industrial en Fray Bentos, ha sido invalorable; y e
espacio cultural para la visibilización del Patrimonio Industrial.